Los obstáculos regulatorios obligan a Adobe a abandonar la adquisición de Figma
La fusión de 20 000 millones de dólares entre Adobe y Figma fracasa en medio de disputas regulatorias. Figma recibirá mil millones de dólares de Adobe como compensación. Los reguladores de la UE y el Reino Unido siguieron ejerciendo presión en los últimos meses, lo que llevó a la suspensión de las negociaciones entre Adobe y Figma.
En un giro sorprendente, Adobe ha cancelado su ambiciosa adquisición de Figma, una reconocida herramienta colaborativa de diseño de productos por valor de 20 000 millones de dólares, debido a la intensa presión regulatoria de la Unión Europea y el Reino Unido. Esta medida, que en un principio iba a convertirse en una de las ventas más importantes del sector tecnológico, ocupando el noveno lugar en adquisiciones históricas, se ha detenido para evitar que se frene la innovación en el sector del software de diseño.
Adobe, líder del mercado de software de diseño, pretendía consolidar su posición con la compra de Figma. Sin embargo, el rápido aumento de la popularidad de Figma, que superó a la alternativa XD de Adobe, generó preocupación entre los reguladores. Preocupados por el impacto en la innovación, los reguladores de la UE y el Reino Unido han seguido ejerciendo presión en los últimos meses, lo que ha llevado a la suspensión de las negociaciones entre Adobe y Figma.
Los temores de los reguladores se centraron en la posible limitación de la innovación que Figma aportaba al sector. Los diseñadores profesionales también se hicieron eco de preocupaciones similares en los últimos meses. Hace apenas unos días, Adobe rechazó las modificaciones propuestas al acuerdo por el organismo antimonopolio del Reino Unido, afirmando que la adquisición no perjudicaría al mercado de software de diseño de productos.
La Comisión Europea compartió un punto de vista paralelo e inició una investigación en agosto. Al mismo tiempo, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos tenía previsto realizar una investigación similar, según informó Bloomberg a principios de este año. Este avance no solo supone un importante revés para la expansión estratégica de Adobe, sino que también suscita debates sobre el delicado equilibrio entre el dominio del mercado y el fomento de la innovación en el panorama del software de diseño.
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